martes, 12 de febrero de 2008

Meditaciones

Por Pedro Zepeda, desde Santiago

Por qué te niegas obstinadamente a perdonar y olvidar? No te das cuenta que tú mismo eres la persona más afectada y la primera víctima de tus rencores? Si sabes y entiendes que Dios perdona todo, absolutamente todo, por qué eres tan arrogante y consideras o crees que tú no debes perdonar? Limpia ya tu espíritu de esos sentimientos y pensamientos negativos y destructivos que no te permiten vivir tu bienestar al 100%. Perdona y olvida, para que seas mucho más feliz. Dios nos perdona más y a cada momento. Ahhhh, y lo más importante, Dios olvida pronto.